Que el sonido de las gotas en la acera,
no sean lloros de las grises nubes,
sino el comienzo de la primavera,
de la alegría que antaño no tuve.
Disfruta el momento, sé feliz,
y al amanecer de un nuevo día,
baña tu mente en oloroso barniz
para espantar penas y melancolías.
sencillo, sincero y hermoso
ResponderEliminarMe alegro que sea de tu agrado. Un saludo y larga vida a la poesía ;)
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