Observo temeroso
peones caídos en combate
en lucha insaciable
contra sus demonios.
Más mierdas a mis espaldas
pesan toneladas de mares
que no estoy dispuesto a dar
mientras su recuerdo no me falle.
Sin poder tomar parte en el guión,
me ampara el canto de los pájaros
que
auguran un tiempo mejor
para nosotros, los bichos raros.
No hay comentarios:
Publicar un comentario